La terraza principal es también la entrada a nuestra alquería. Una pequeña pasarela empedrada cruza a través de un extenso jardín mediterráneo, lleno de rosales, azaleas y buganvillas.
Destacan con elegancia los característicos frutos cítricos de la costa valenciana: hablamos de los naranjos y los limoneros. Estos pequeños árboles frutales impregnan el entorno con su aroma cítrico en invierno y con el de su flor en primavera, haciendo que todos los jardines y la terraza cobren un aire fascinante y mágico.
Cualquier rincón de nuestro hotel es idóneo para descansar y relajarse con una buena lectura, pero en nuestra terraza principal podrás disfrutar de unas coloridas vistas de todo el entorno, completamente bañadas por la luz del mediterráneo.